miércoles, 2 de diciembre de 2009

Me encanta aprender cosas nuevas cuando navego.
Eso hace que un día aparentemente normal pueda convertirse en un día muy divertido y lleno de sensaciones.
En el agua observas a tu amigo/contrincante con el cual se establece un pique sano.
Fuera del agua recordamos los fallos para solucionarlos la proxima vez.
Llevamos un par de días mi amigo Pons y yo intentando hacer backloops a un pié. Una nueva sensación en el aire. Y otra sensación no tan nueva aunque sí algo dolorosa cuando caemos mal, cosa muy habitual.







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